Salida: La caminata comienza en la Catedral de Oporto, una catedral fortificada que ofrece una vista impresionante de la ciudad. La catedral es el punto de partida oficial para muchos peregrinos.
Ruta: La caminata comienza por las calles adoquinadas del centro histórico de Oporto. Tras cruzar el Puente D. Luís I, el camino sigue por el lado de Vila Nova de Gaia, pasando por zonas más suburbanas e industriales. Después de cruzar el río Duero, el paisaje cambia a campos agrícolas y aldeas más tranquilas.
Puntos de interés: La Iglesia de São Pedro de Rates (un pequeño desvío), una de las iglesias románicas más antiguas de Portugal.
Llegada: Vilarinho, una tranquila aldea que ofrece alojamiento sencillo para peregrinos. Es un lugar ideal para descansar tras el primer día.
Ruta: El camino se aleja de Oporto hacia una zona más rural, pasando por pequeñas aldeas y caminos de campo. El paisaje se vuelve más verde y montañoso a medida que te acercas a Barcelos.
Puntos de interés: Antes de llegar a Barcelos, pasa por São Pedro de Rates, un lugar de gran importancia histórica en el Camino de Santiago, y por el puente medieval sobre el río Cávado.
Llegada: Barcelos, conocida por su famoso gallo, un símbolo nacional de Portugal. Es una ciudad rica en historia, con puntos destacados como el Paço dos Condes y la Iglesia Matriz. Barcelos ofrece buenas opciones de alojamiento para peregrinos.
Ruta: Este es uno de los días más largos y exigentes del Camino. Se atraviesa una vasta área rural, con campos de maíz, viñedos y pequeñas granjas. La ruta es principalmente plana, pero la distancia hace que sea un día desafiante.
Puntos de interés: Al llegar a Ponte de Lima, la ciudad más antigua de Portugal, admira su famosa puente romana y medieval que cruza el río Lima. Ponte de Lima también es conocida por el Vinho Verde y sus bien cuidados jardines.
Llegada: La ciudad ofrece excelentes instalaciones para los peregrinos, con varios albergues y restaurantes tradicionales.
Ruta: Un día con una subida significativa al cruzar la Serra da Labruja. Este es uno de los tramos físicamente más desafiantes del Camino Portugués, pero también uno de los más hermosos, con espectaculares vistas del valle y densos bosques.
Puntos de interés: En el camino, pasa por la Capilla de Senhora das Neves, donde muchos peregrinos hacen una pausa para descansar.
Llegada: Rubiães, una pequeña aldea que sirve como punto de descanso para los peregrinos. Hay varios albergues y alojamientos sencillos en la zona.
Ruta: Después de la subida del día anterior, la caminata de hoy es relativamente fácil. Se cruza el río Coura por el histórico Ponte Velha. Desde Valença, el camino sigue las murallas de la fortaleza que protege esta ciudad fronteriza.
Puntos de interés: La fortaleza de Valença do Minho es un sitio imperdible. Pasea por sus murallas y calles estrechas antes de cruzar la frontera.
Llegada: Tui, ya en Galicia (España), donde se puede visitar la imponente Catedral de Tui, que mezcla los estilos románico y gótico.
Ruta: El recorrido de hoy atraviesa un paisaje mixto de zonas urbanas y rurales. Hay una ruta alternativa, más natural, que evita la zona industrial de O Porriño y es recomendada por muchos peregrinos.
Puntos de interés: El Ponte das Febres, donde se cree que San Telmo, el santo patrón de Tui, enfermó.
Llegada: O Porriño es una ciudad industrial con buena infraestructura para peregrinos. Aunque no es particularmente pintoresca, ofrece buenas opciones de alojamiento y restauración.
Ruta: Una etapa tranquila, que pasa por áreas boscosas y pequeñas aldeas. El paisaje alterna entre campos agrícolas y montañas al fondo.
Puntos de interés: El Monte Cornedo ofrece una magnífica vista sobre las Rías Baixas y la ciudad de Vigo.
Llegada: Redondela, una ciudad junto a la ría de Vigo, donde se unen el Camino Central y el Camino de la Costa.
Ruta: El camino sigue a lo largo de la costa de la ría de Vigo, pasando por zonas rurales y pequeñas aldeas. Se cruza el histórico puente de Pontesampaio, lugar de una importante batalla contra las tropas napoleónicas.
Puntos de interés: El centro histórico de Pontevedra es encantador, con calles peatonales y edificios históricos como la Iglesia de Santa María la Mayor y la Plaza de la Ferrería.
Llegada: Pontevedra ofrece excelentes instalaciones para peregrinos, con múltiples opciones de alojamiento y restauración.
Ruta: El camino pasa por verdes valles y bosques de eucaliptos, con vistas constantes de viñedos y campos agrícolas.
Puntos de interés: Las termas de Caldas de Reis, conocidas desde la época romana, donde los peregrinos pueden relajar sus cansados pies.
Llegada: Caldas de Reis es una pequeña villa termal, ideal para un descanso reconfortante.
Ruta: Se atraviesa el valle del río Ulla, una zona rural rica en vegetación. El camino es mayormente llano, con algunas suaves subidas.
Puntos de interés: Padrón es un lugar de gran importancia en la tradición jacobea, ya que se cree que aquí llegó el cuerpo de Santiago por barco a Galicia.
Llegada: Visita la Iglesia de Santiago y el Convento del Carmen en Padrón.
Ruta: La etapa final es una mezcla de zonas rurales y urbanas. La subida al Monte do Gozo ofrece una emocionante primera vista de las torres de la Catedral de Santiago.
Puntos de interés: La llegada a la Plaza del Obradoiro, frente a la Catedral de Santiago de Compostela, es uno de los momentos más emocionantes de la peregrinación.
Llegada: Santiago de Compostela, donde la grandiosa Catedral marca el final del Camino. Aquí, los peregrinos pueden asistir a la famosa Misa del Peregrino.
Actividades: Dedica este día a explorar la ciudad. Además de la Catedral, visita el Museo de la Catedral, el Mercado de Abastos y el Parque de la Alameda.
Consejos generales:
Señalización: Sigue siempre las flechas amarillas y los hitos de piedra (mojones) que indican la distancia a Santiago.
Alojamiento: Muchos albergues funcionan por orden de llegada, por lo que es recomendable llegar temprano, especialmente en temporada alta.
Tiempo de caminata: Reserva entre 6 y 8 horas diarias para caminar, dependiendo de tu ritmo y paradas. Comienza temprano para evitar las horas de mayor calor.